ÁNFORA
en: AMPHORA
ca: ÀMFORA
Las ánforas son jarras que se han encontrado alrededor de la costa mediterránea y se utilizaron por primera vez en el siglo XV a.C. Suelen tener una base en punta, con o sin asas, puede ser de cualquier tamaño y pueden tener un cuello que forma una línea continua desde la parte más ancha de la ánfora hasta el borde final del cuello. Otras que se diferencia porque el hombro de la ánfora curvada y de forma pronunciada se une a la parte inferior del cuello. Varían mucho en altura desde 25 cm a 2 metros. Se hicieron para guardar y transportar las uvas, aceitunas, vino, aceite, granos y otros muchos productos.
Originalmente, el ánfora se hacía con el método de churros después, cuando se empezó a utilizar el torno, la ánfora se hacia por partes. Primero la mitad superior hasta formar el cuello, después la mitad inferior, que se estrechaba ligeramente en la base. Esta mitad inferior se dejaba endurecer lo suficiente para soportar el peso y que no se deformara al colocar encima la mitad superior. Para acabar se añadía el cuello, también previamente torneado a parte, con una abertura generalmente del mismo tamaño que la base. Cuando el ánfora estaba ajustada, se sellaban las uniones, se reducían y suavizaban ambos lados. Si el ánfora acababa en pico, se alargaba la base hasta darle la forma en punta. Cuando el cuello era demasiado pequeño para que entrara la mano, se presionaban apretando las dos partes y se sellaban desde fuera. Al final se colocabas las asas